Santo Domingo RD. Doña Ramona Jáquez de Salcedo, una
entusiasta y encantadora fantinensa, se prepara para festejar este domingo 22 de septiembre sus 100 años de vida, rodeada de su entorno familiar y de un inseparable y noble compañero: Listín Diario.
Su nieta, Solangel, llegó la mañana de ayer viernes a LISTÍN DIARIO en la víspera del centenario de su abuela, para compartir la historia de cómo doña Ramona disfruta cada día recibir la versión impresa de este diario.
“Le da una felicidad inmensa recibirlo, lo lee una y otra vez a lo largo del día”, contó, con entusiasmo. Nacida en 1924 en Fantino, Cotuí, de la provincia Sánchez Ramírez, doña Ramona ha gozado de una vida llena de experiencias, rodeada por una gran familia que incluye a ocho hijos: Gloribel, Maritza, Luis Alberto, Nabia, Margarita, Valentín, Adalgisa y Mayra, 15 nietos y 10 bisnietos.
Doña Ramona, como la llaman sus vecinos desde los 44 años que tiene en la Francisco Carillo número 14, en Villa Mella, de Santo Domingo Norte, ha sido una ávida lectora de este diario desde hace años. Aún más sorprendente es que a su avanzada edad continúa leyendo sin necesidad de usar lentes. Su nieta dijo que, para ella, leer el periódico es un asunto vital.
“Ella lo espera, porque sabe a la hora que llega y cuando lo tiene se pone como un niño pequeño cuando le dan un juguete nuevo”, contó. La familia de doña Ramona comprende cuán importante es el diario en su vida.
De hecho, hubo una vez una discusión entre sus hijos sobre si continuar pagando la suscripción anual. Finalmente, decidieron mantenerla porque, según Solangel, “el periódico es lo que mantiene vivo su espíritu, es una fuente de alegría para ella”.
A lo largo de los años, doña Ramona se ha ganado el cariño de su comunidad. Sus vecinos la conocen como una persona hospitalaria, humilde y espontánea.
“Es de esas personas que siempre dice las cosas como las piensa”, comentó su nieta. Además, a pesar de su avanzada edad, aún le gusta comentar sobre las noticias que lee, aunque a veces las olvida y vuelve a leerlas.
“A veces nos dice sorprendida que mataron a dos en tal sitio, y luego lo olvida y lo relee para volver a contarlo”, explicó, entre risas.
También que se da cuenta cuando le falta una página al periódico. “Mi tío le toma la página del crucigrama para llenarlo y ella dice que le falta la página tal”, narró.
Su nieta comenta que, a pesar de crecer en una década muy difícil, su abuela siempre ha tenido una mente muy abierta. Sus familiares la describen como una mujer hospitalaria y humilde. Además, muy amada y querida por todos sus vecinos.
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